Guayaquil se ha convertido en un punto de llegada para miles de personas que buscan nuevas oportunidades. En este contexto, el Centro Municipal Ciudadanos Integrados, del Departamento de Movilidad Humana, se ha consolidado como un aliado clave para acompañar, orientar y brindar soluciones reales a quienes enfrentan situaciones de vulnerabilidad. En lo que va del año, el centro ha recibido a 5.696 usuarios y ha brindado 12.237 atenciones, reflejando la magnitud de su labor y la importancia de su presencia en la ciudad.
Al llegar, cada ciudadano es recibido bajo un esquema de atención mixto que articula servicios municipales y humanitarios. Migrantes, desplazados internos y familias en situación socioeconómica compleja encuentran aquí un primer punto de contención y guía. Los servicios incluyen atención médica y psicológica, asesoría legal, espacio de niñez y lactario; además de la entrega de kits de alimentación, higiene, escolar, materno y de bebé, asegurando que las familias cuenten con insumos básicos mientras regularizan su situación o acceden a más apoyos.
Una de las mayores fortalezas del centro es su capacidad para derivar casos y conectar a los ciudadanos con organizaciones que amplían la red de ayuda. Entre los aliados se encuentran: ACNUR, para procesos de refugio y protección internacional; HIAS, socio implementador del Programa Mundial de Alimentos con acceso a tarjetas de alimentos; NRC (Consejo Noruego para Refugiados), con servicios de asistencia legal y protección; COOPI y UNICEF, con programas de apoyo a niñez, arrendamiento y familias en riesgo; y RET International, con acompañamiento educativo y humanitario.
El centro también coordina ingresos a espacios de descanso y alimentación, como Oasis, Fundación Manuel Freire y comedores vinculados a la Arquidiócesis de Guayaquil, garantizando techo y comida para quienes se encuentran en tránsito o en situación de calle.
El equipo del Centro Municipal Ciudadanos Integrados no solo orienta: acompaña cada caso desde la comprensión, la escucha activa y la acción inmediata. Cada día, el centro recibe historias difíciles de movilidad humana, pero también impulsa nuevos comienzos. Es un refugio para quienes llegan con incertidumbre y un motor para quienes necesitan apoyo para volver a levantarse.
