Cada viernes, la ciudad se reactiva con propuestas que invitan a ocupar el espacio público de manera organizada y festiva, consolidando nuevas formas de encuentro entre vecinos, amigos y familias.
Esa energía se siente con fuerza en la calle Panamá, que se ha posicionado como uno de los principales escenarios de la vida nocturna urbana. Anoche, 19 de diciembre, los exteriores del Museo del Cacao reunieron a cientos de personas durante la segunda edición de “Baila la Calle”, una propuesta impulsada por los colectivos Conciencia Positiva, Sacrilegio y Malviartes, que forma parte del programa “Cae a Panamá Nocturna”, promovido por el Municipio de Guayaquil, a través de la Dirección de Turismo y Eventos Especiales.
Durante cinco horas, entre las 19:00 y las 00:00, ciudadanos de distintos sectores de la ciudad compartieron un espacio pensado para el disfrute colectivo, la convivencia y la apropiación positiva del centro histórico. La música fue el hilo conductor de la jornada, a cargo de DJ Jazzam, quien mezcló salsa, cumbia, merengue y ritmos tropicales, creando un ambiente dinámico que mantuvo la pista llena y convocó a personas de todas las edades.
La experiencia también destacó por su carácter inclusivo y familiar, aspecto valorado por quienes asistieron por primera vez. Daniela Monroy, quien llegó junto a un grupo de amigos desde el sector de Fertisa, resaltó el ambiente del evento. “Es una experiencia muy bonita, la gente se agrupa aquí, la música es muy buena y la mayoría viene a compartir en familia”, señaló.
Para otros asistentes, la actividad representó una forma distinta de celebrar y vivir la ciudad. Lenín Marcano acudió para festejar el cumpleaños de una amiga y destacó la singularidad del espacio. “Me invitó una amiga que está celebrando su cumpleaños. Es algo fuera de lo común; no se celebra, como normalmente, en una casa, sino en un espacio público con buena música. Se lo vive totalmente distinto”, expresó.
El desarrollo de la jornada contó con el acompañamiento operativo del Municipio, mediante la presencia de Agentes de Control Municipal de Segura EP y la instalación de baños portátiles, acciones que proporcionaron condiciones adecuadas, orden y seguridad para los asistentes.
Desde su inicio, el pasado 21 de noviembre, “Cae a Panamá Nocturna” suma cinco fines de semana consecutivos de activación nocturna, aportando a la recuperación del espacio público, al dinamismo cultural del centro de Guayaquil y a la construcción de una ciudad que se vive, se comparte y se disfruta también de noche.









