El derrame de hidrocarburos en un ramal del Estero Salado ha provocado daños incuantificables en la biodiversidad del sector, afectando manglares, cangrejos, aves acuáticas y otras especies silvestres. Frente a esta emergencia ambiental, la Dirección de Ambiente del Municipio de Guayaquil activó acciones de contención que articulan esfuerzos públicos, privados y comunitarios.
Desde el pasado domingo 1 de junio, día en que se detectó la contaminación, se han ejecutado tareas de rescate de fauna, limpieza y contención. Hasta el momento, se ha logrado salvar 13 iguanas, una garza y una tortuga cofre, que fueron entregadas a la autoridad ambiental para su recuperación.
La intervención incluye la remoción de material vegetal afectado y la limpieza del cuerpo hídrico, en coordinación con guardaparques del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE). A esta tarea se sumó el sector pesquero artesanal con 23 pescadores del Golfo de Guayaquil, quienes se ofrecieron a colaborar en el sector con implementos de bioseguridad para evitar poner en riesgo su salud.
“Vamos a continuar en el sitio un mes más haciendo un trabajo articulado de limpieza. Es importante que la ciudadanía sepa que estamos haciendo todos los esfuerzos para recuperar este espacio”, aseguró Isabel Tamariz, directora de Ambiente.
La respuesta ha contado también con el respaldo del sector privado, que donó insumos clave para los equipos en campo: 40 overoles antifluido, 80 pares de guantes de bioseguridad, 50 mascarillas KN95, 15 mascarillas con filtros, 45 pares de botas. Además, Interagua colaboró con 56 barreras de contención tipo salchichas de 1,15 m, 6 barreras de contención tipo salchichas de 2,55 m, 16 almohadas absorbentes de contención, 8 sacos SpilFix y 28 paños absorbentes.
Diversas entidades se sumaron a la atención del incidente: Petroecuador, Segura EP, Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, la Agencia de Regulación y Control del Agua (ARCA) y la Empresa Pública del Agua (EPA).
El sector afectado forma parte de la Reserva de Producción Faunística Manglares El Salado, área protegida que abarca aproximadamente de 15535 hectáreas entre bosque de mangle, espejos de agua y canales naturales. Esta zona fue declarada reserva en 2003 y constituye un ecosistema estratégico para la ciudad.