El suroeste de Guayaquil vuelve a convertirse en un punto de encuentro para la creatividad y la tradición. Sus calles se llenan de color y fantasía con gigantescas figuras de personajes de televisión, animados y superhéroes que atraen a familias enteras y transforman el suburbio en un paseo cultural que marca el cierre del año con optimismo.
La tarde del viernes 26 de diciembre, el alcalde Aquiles Alvarez recorrió la Ruta de los Monigotes, iniciando su visita en la intersección de las calles Pedro Pablo Gómez entre Tama y Balzar, donde constató el trabajo y dedicación de los artesanos locales, protagonistas de esta expresión popular que cada año gana mayor reconocimiento.
“Estamos felices, esto ya es parte de la historia de los guayaquileños, los guayaquileños artesanos que se sacan el aire trabajando todo el año para brindarnos estos espacios lindos, en el suroeste de Guayaquil (…) moviendo la economía, moviendo también el ánimo de los guayaquileños, enfrentar y disfrutar un cierre del año más allá de que haya sido duro, siempre con el sentimiento de esperar lo mejor este 2026”, expresó el Burgomaestre.
Asimismo, recordó que el Municipio de Guayaquil respalda esta iniciativa en 21 puntos estratégicos, con una inversión superior a los USD 25.000, lo que permite fortalecer la tradición, generar empleo y dinamizar la economía de decenas de familias. “Queremos también incentivar el turismo de esta manera”, agregó.
Entre los monigotes que ya captan la atención del público destacan figuras como el Chavo del 8, Superman junto a su mascota, IT, Jorgito el Guayaco y el Sombrerero Loco, elaborados con papel, fomix, espuma y madera. Estas obras pueden apreciarse en sectores como la 14 y Ayacucho, Capitán Nájera y la 16, Huancavilca y la 17, y la 6 y Ayacucho.
La Ruta de los Monigotes permanecerá abierta al público hasta el 11 de enero de 2026, con apoyo en seguridad y movilidad por parte de SEGURA EP y la Autoridad de Tránsito y Movilidad, invitando a guayaquileños y visitantes a recorrer estos espacios que ponen en valor el talento artesanal y mantienen viva una de las tradiciones más representativas de la ciudad.
