Con un mensaje frontal y cargado de indignación, el alcalde Aquiles Alvarez utilizó su enlace radial de este miércoles para denunciar la falta de reacción de diversos sectores que deberían defender a la ciudad.
“Guayaquil no ha escuchado la voz de los representantes de las Cámaras ni de la Academia ante todo el atropello que tiene Guayaquil, ante la persecución a Guayaquil”, señaló, reclamando la ausencia de pronunciamientos frente a lo que considera agresiones constantes.
Además, anunció que dejará de convocar a estos grupos porque, según afirmó, “está clarísimo que no les interesa alzar la voz por Guayaquil, no los convoco, si se quieren sumar que se sumen, pero nosotros estamos con Dios, con la gente y con los barrios, con eso es suficiente”. Agradeció, en contraste, el respaldo de los barrios y sus dirigentes.
El Burgomaestre criticó la postura pasiva frente a temas críticos: “Teníamos una academia que alzaba la voz, hoy no, y durante la desidia de un Gobierno, ante la intención de apropiarse de USD 400 millones de los fondos de los guayaquileños y liquidar la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil, ante el abandono en salud, ante el pago de rentas al Muy Ilustre Municipio de Guayaquil, tarde, mal y nunca, callan, son cómodos, ¿para qué existen las cámaras? ¿Solo para hacer negocios?”, expresó.
Recordó que esta administración “ha colaborado con las Cámaras como nunca antes” y lanzó un llamado directo: “yo sí quiero hacer un llamado, que se despierten o es que solo quieren estar en las cámaras para hacer negocios? Antes teníamos representantes”.
Alvarez también relató que intentó impulsar un frente cívico para defender la autonomía de la ciudad, pero no encontró apoyo: “cuando me puse a ver a los lados, no había ninguno porque se esconden (…) son tibios, pero cuando era contra Correa con la Nutella y demás, estaban en primera fila, ahí sí saltaban, eso es lo que estamos viviendo hoy y me duele en el alma, los hemos apoyado a full”.
Cuestionó que estos sectores permanezcan ausentes incluso en momentos institucionales relevantes: “para defender a Guayaquil, su autonomía y los ataques que está recibiendo están calladitos y eso (…) lo va a recordar los guayaquileños, va a recordar esta tibieza y va a quedar en la historia que el único que alzó la voz fui yo y no importa, con Dios es suficiente y con la gente también vamos a prevalecer”. Añadió que, inclusive, en las últimas sesiones solemnes “ni siquiera han ido”.
Finalmente, evocó épocas de liderazgo más activo dentro de las cámaras: “A lo largo de la historia hemos tenido representantes importantes en las cámaras de comercio, construcción, producción. Teníamos una María Gloria Alarcón que luchaba en primera línea con el alcalde Jaime Nebot en cualquier marcha que llamaba la ciudad a exigir respeto sobre autonomía y demás, tuvimos un Pablo Arosemena que también salió a marchar”.






