La Dirección de Bienestar Animal rescató tres perros y un gato en la comuna Puerto Arturo, ubicada en el Golfo de Guayaquil, y perteneciente a la parroquia rural de Puná, la cual forma parte de una gran extensión de manglar, donde se encuentran especies protegidas y muy sensibles.
La comunidad está a una hora y media en lancha. El operativo se articuló con Wildaid y la Capitanía del Puerto de Guayaquil luego de conocerse que los animales fueron abandonados por los habitantes, quienes debieron dejar sus hogares de manera precipitada por la inseguridad en la que está inmersa esta zona.
Estos animales domésticos representaban un riesgo de convertirse en especies invasoras y depredadoras de la fauna propia del ecosistema manglar. Por esa razón, con el objeto precautelar los derechos de los animales, funcionarios municipales intervinieron en esta comuna y así proteger a las especies endémicas.
Las mascotas rescatadas se encontraban en estado de desnutrición, altamente deshidratados, llenos de ectoparásitos y hemoparásitos; indistinto de la sintomatología viral que presentaron. Fueron traslados al Centro de Bienestar Animal en Guayaquil, donde serán evaluados a profundidad y se los pondrá en cuarentena hasta que mejoren su estado de salud.
Los perros tienen un linaje asociados a manadas. Cuando son abandonados comienzan a tener comportamientos asilvestrados, se comienzan a unir en manadas y empiezan a cazar convirtiéndose en un peligro para los animales endémicos de los manglares. Este fue la primera intervención con la finalidad de proteger la flora y fauna de este ecosistema característico de Guayaquil y la costa ecuatoriana.
Uno de los objetivos de la Dirección de Bienestar Animal del Municipio de Guayaquil es controlar las poblaciones de animales domésticos que existen en el cantón y evitar su afectación a la fauna silvestre.