En Mapasingue Este todavía existen rincones donde nunca había llegado la obra pública. Son tramos en ladera o calles inconclusas donde, por años, los vecinos convivieron con tierra, lodo y canales naturales que dificultaban los desplazamientos más básicos, como ir a la tienda, a la escuela o salir a trabajar.
Para cambiar esa realidad, el Municipio de Guayaquil ejecuta la construcción de 17 escalinatas y accesos viales, junto con un nuevo sistema de aguas lluvias y la repotenciación del alumbrado público. Los trabajos se desarrollan en las cooperativas Antonio Bermúdez, Colinas de Mapasingue 1 y 2, Luz de América, 24 de Octubre y 26 de Febrero, con una inversión de USD 912.000, que beneficiará a unas 7.000 personas.
Uno de los frentes más complejos se ubica entre los sectores Luz de América y Colinas de Mapasingue, en un tramo que nunca contó con acceso formal. Allí se construyen una escalinata y una calle, donde ya se instaló un colector pluvial de 540 milímetros y diez cámaras para el drenaje.
Los moradores reconocen que la intervención marca un antes y un después en su vida diaria. “Aquí los inviernos eran terribles porque esto colapsaba con las aguas lluvias. La insalubridad era terrible, todo lodo, todo sucio, salíamos en zapatillas”, relató Antonio Soledispa, habitante del sector. Su testimonio se repite entre quienes han esperado por obras básicas durante décadas. “Aquí hemos luchado desde el 2002. En el 2002 me dijeron que no había presupuesto. Desde el 2004, 2008, 2006 hasta 2010… Me decían que no había presupuesto, que ya la obra, que ya iba, ya iba”, recordó Nancy Avelino.
La intervención incluye además la construcción de un talud en la cooperativa 26 de Febrero y forma parte de la línea de gestión del alcalde Aquiles Alvarez, enfocada en llevar obras a sectores que durante décadas quedaron fuera de la inversión municipal.











