Durante años, varios parques de Guayaquil permanecieron deteriorados, con estructuras desgastadas, juegos fuera de uso y áreas que perdieron su función como espacios comunitarios. Hoy, esta realidad está cambiando gracias a un proyecto integral de repotenciación impulsado por el Municipio de Guayaquil, a través de la empresa pública Parques EP, que busca devolver a estos lugares su valor como puntos de encuentro, recreación y bienestar para miles de familias.
El plan contempla la intervención de 10 parques representativos de la ciudad: Victoria, Centenario, Víctor Emilio Estrada (Urdesa), Stella Maris (Guasmo Norte), Coviem, 7 Canchas, Acacias, Girasoles (Cdla. Ceibos), FAE y Matilde Hidalgo (Cdla. Bolivariana). Dos de ellos (Stella Maris y Acacias) ya fueron adjudicados y sus obras comenzarán a mediados de noviembre, mientras los ocho restantes se encuentran en proceso de contratación.
El parque Stella Maris será completamente renovado con resane y pintura, mantenimiento de baños, instalación de nuevos juegos infantiles, máquinas biosaludables y puntos de control para reforzar la seguridad. La intervención incluye además la recuperación de la casa comunal, donde los vecinos podrán realizar actividades culturales y talleres, la instalación de una cubierta para graderíos, arcos deportivos y un moderno sistema de iluminación LED.
De forma paralela, el parque lineal de la ciudadela Las Acacias contempla la implementación de una Estación de Acción Segura (EAS), nuevos juegos infantiles y geriátricos, máquinas biosaludables, una glorieta, mallas para cerramiento de canchas, pintura integral, arcos deportivos, asientos con cubierta de policarbonato y un sistema de luminarias LED con nuevos postes y la construcción de un baño público.
Con una inversión total de USD 1,2 millones, este programa generará alrededor de 5.000 empleos directos e indirectos, dinamizando la economía local y priorizando la mano de obra guayaquileña.
Cada parque será rediseñado en función de las necesidades socializadas por los consejos barriales junto con delegados de la Dirección de Vinculación con la Comunidad, quienes canalizaron las demandas ciudadanas y las transformaron en propuestas concretas de mejora.
La repotenciación de estos espacios representa más que una obra física: es parte de la reconstrucción del tejido social que impulsa el Cabildo, en lugares que antes estuvieron marcados por el abandono y que hoy proyectan convivencia, participación y orgullo barrial.