Ubicado en el corazón de Guayaquil, el Mercado Central arriba este martes 10 de octubre a su centenario de funcionamiento por lo que su edificación es considerada como patrimonio cultural de la ciudad.
Localizado en la manzana de las calles Clemente Ballén (norte), 10 de Agosto (sur), Lorenzo de Garaicoa (este) y 6 de Marzo (oeste), su construcción estuvo a cargo de los italianos Luigi Fratta y Óscar Bataglia. Fue gracias a esta edificación el sector se volvió comercial.
A raíz de su funcionamiento como un mercado de víveres y artículos varios, a su alrededor se asentaron de forma paulatina una variedad de negocios como tiendas, farmacias, almacenes de telas, ferreterías, etc. que cambiaron la imagen de la zona, al convertirse en un pilar de la economía local.
En 2018 el mercado dejó de funcionar de manera temporal, debido a trabajos de remodelación de su estructura en el interior, aunque conservó el diseño de su fachada. Actualmente, el Municipio de Guayaquil mantiene un constante control, tanto en los interiores como en el exterior para evitar la ocupación de las aceras por parte de comerciantes no regularizados que se conviertan en competencia desleal para los vendedores que están adentro.
El espacio cuenta actualmente con 268 puestos distribuidos de manera ordenada. Los ciudadanos pueden encontrar locales de abasto, de artículos varios, cárnicos, aves, mariscos, flores, frutas, lácteos, productos naturales y florerías.
Lourdes Guzmán Taco tiene 80 años. Es quiteña de nacimiento, pero vive en Guayaquil desde los 7 y desde esa edad empezó a trabajar en el mercado. Ella ha visto los cambios en la estructura del edificio, así como del entorno.
“El mercado ya estaba cuando empecé a trabajar desde pequeña junto con mi mamá. Siempre he vendido hornado con mote. La mayoría de los vendedores son hijos o nietos de los que llegamos primero; hemos visto los cambios que han hecho las autoridades en el mercado, ahora estamos más ordenados que antes y eso mejora la imagen”, expresó la mujer.
Actualmente, la Dirección de Aseo Cantonal, Mercados y Servicios Especiales (DACMSE) realiza acciones para incentivar las visitas a este icónico lugar de la ciudad. En el lugar se han efectuado trabajos de mantenimiento y en julio pasado se llevó a cabo una feria gastronómica.
El horario de atención al público es de 06:00 a 17:00; para la introducción de productos es de 05:00 a 10:00.